Pautas para la investigación

En los distintos proyectos y tareas que desarrolla el alumnado suele ser necesaria una labor de indagación: cuando tienen que escribir una entrada en un blog, cuando tienen que exponer en público, cuando tienen que presentar un trabajo escrito, cuando tienen que escribir un guión de radio, cuando tienen que elaborar un periódico, cuando tienen que debatir … Por ello, nos parece necesario acordar unas pautas para la investigación que sean utilizadas por el alumnado siempre que necesiten buscar información para cualquier proyecto, en cualquier asignatura.
A partir de la rúbrica con los criterios de evaluación de centro que establecimos el curso pasado, que se puede consultar en este enlace, hemos definido los siguientes pasos:

1. Definición clara y precisa de los objetivos de la búsqueda (qué y por qué lo busco),
2. Delimitación de los itinerarios de búsqueda más adecuados (cómo y dónde lo busco),
3. Análisis crítico con base en los resultados de la búsqueda (qué he encontrado) y los
contenidos localizados (qué información nueva y útil he encontrado),
4. Autoría de la información, buscar información sobre esa persona.
5. Leer los comentarios que hacen otros usuarios.
6. Contrastar la información con otras fuentes de internet o de otro soporte.
7. Buscar fecha de la última publicación para comprobar que está actualizada y si esto es relevante.
8. Proceso y almacenamiento óptimo de la información encontrada (con qué herramientas).
9. Comprobar que la expresión escrita es correcta.
10. Utilización, presentación y comunicación de la información hallada.

GESTIÓN DE LAS FUENTES DE INFORMACIÓN

La información está disponible en una gran variedad de fuentes y formatos: texto impreso, televisión, vídeos, bases de datos, webs, y mucho más. Es importante saber por qué, cuándo y cómo usar todos esos recursos, así como ser capaz de evaluar de forma crítica sus contenidos.
Como ocurre con la comunicación oral o escrita, las habilidades irán mejorando con el tiempo, conforme vayamos profundizando en los temas que investigamos y a medida que se desarrollan actividades de búsqueda, selección y evaluación de información. No podemos pretender llegar a ser expertos en información de la noche a la mañana.
Algunos ejemplos de fuentes de información a nuestro alrededor son:

• libros y publicaciones de la Biblioteca pública (todavía no funciona la Biblioteca de nuestro instituto) o libros en casa;
• personas que conozcáis que sepan del tema que te interesa; podéis preguntar a vuestro profesores/as.
• Internet.

Cuando buscamos información en Internet, y también en los libros, hay que saber que no todas las fuentes son igual de fiables. Que una información esté en Internet no significa que sea cierta; hay que tener cuidado porque cualquier persona puede escribir en una web, un blog, una red social, etc.

Por tanto para aprender a distinguir las fuentes de información fiables os vais a fijar en lo siguiente:

• Autor/a de la información publicada en Internet.
  • ¿el autor/a es experto en la materia? Podéis buscar su nombre en Google para saber si es profesor en la materia, si da conferencias, si trabaja en alguna entidad que se dedique al tema del que habla, o podéis preguntar a alguien que sepa del tema para que os dé su opinión.

• ¿la información es de una institución oficial (ministerio, consejería, centro educativo, centro sanitario, …)? Busca algún logotipo para saber si puede ser de una institución. Normalmente la información de las instituciones es fiable. Si es de una empresa ten en cuenta que puede tener intereses comerciales relacionados con la información que publica.

• ¿qué opinan los lectores de la información publicada en esa web o blog? Hay blogs muy buenos sobre un tema que no son de una institución oficial ni de un experto, pero descubrimos su calidad gracias a la opinión de muchos usuarios que los leen. ¿Hay muchos comentarios en el blog o web? ¿te parecen serios?

• ¿qué reputación tiene en las redes sociales? ¿qué repercusión tienen sus publicaciones en las redes sociales y entre qué seguidores? Cuando una persona escribe información de calidad normalmente hay muchas personas que se dedican a ese tema o que saben de él que retuitean o comparten en Facebook sus publicaciones porque les parecen interesantes.

• Calidad de la expresión escrita: las informaciones de calidad suelen estar bien expresadas. Ten en cuenta que para reconocer que algo está bien expresado tienes que saber cómo expresarte bien. Este es un ejercicio interesante.

• ¿Está actualizada la información? ¿de qué fecha es? Si la información no es muy actual puede estar anticuada; aunque en algunos casos esto no tiene por qué ser un problema. Vais a aprender a buscar información dentro de un rango de fechas o en un plazo determinado para evitar este posible problema.
• Calidad de la presentación: normalmente la información de calidad suele estar bien presentada, aunque no siempre ocurre así. Esto es una pista pero no un criterio de selección.

La asimilación de estas estrategias nos parece esencial, especialmente cuando no nos limitamos a única fuente de información como el libro de texto, y permitirá al alumnado desarrollar un nivel avanzado de competencia digital que le será muy útil tanto en su trayectoria académica como en su vida diaria.